Una tragedia golpeó la ciudad de Bombay, en el oeste de la India, cuando un anuncio publicitario de gran tamaño se desplomó sobre una gasolinera durante una violenta tormenta, dejando un saldo de ocho personas fallecidas y al menos 64 heridas.
El fatídico incidente tuvo lugar el lunes en el suburbio de Ghatkopar, cuando la estructura de aproximadamente 30 metros de altura fue arrancada de su base por la fuerza del viento y cayó sobre la estación de servicio y varios vehículos que se encontraban en el área.
Las impactantes imágenes del colapso se difundieron rápidamente en las redes sociales, mostrando el momento exacto en que la estructura se precipitaba sobre las filas de autos, generando un ruido ensordecedor y dejando a su paso un panorama de devastación.
Inmediatamente después del accidente, equipos de emergencia se movilizaron al lugar para rescatar a las víctimas atrapadas bajo los escombros y brindar atención médica a los heridos. El comisionado de la Corporación Municipal Brihanmumbai, Bhushan Gagrani, confirmó que cuatro personas perdieron la vida en el lugar del incidente, mientras que otras 64 fueron trasladadas a hospitales cercanos, una de ellas en estado crítico.
El vicegobernador del estado de Maharashtra, Devendra Fadnavis, describió la tormenta como “sin precedentes” y enfatizó la necesidad de priorizar el rescate de las personas atrapadas y gestionar la situación con extrema precaución.
Las autoridades han iniciado una investigación para determinar las causas exactas del colapso y evaluar las medidas de seguridad correspondientes. En las redes sociales, los usuarios han expresado preocupación por la seguridad de las estructuras publicitarias en la ciudad, señalando la necesidad de tomar medidas para prevenir futuros accidentes en condiciones climáticas adversas.
El desplome del anuncio coincidió con una tormenta de polvo que paralizó el transporte público y causó cortes de energía en varios distritos de Bombay, afectando incluso las operaciones del aeropuerto local con la cancelación de varios vuelos debido a las adversas condiciones meteorológicas.
Redacción / El Telégrafo







