En un acto de amor inquebrantable, el equipo médico del Hospital General de Zona (HGZ) No. 33 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Nuevo León llevó a cabo un procedimiento quirúrgico de alta complejidad para salvar la vida de Edgar Damián, un joven de 30 años que luchaba contra una insuficiencia renal crónica desde hace cinco años.
Este acto de amor y sacrificio fue protagonizado por su madre, doña Margarita Sánchez, quien decidió donar uno de sus riñones para darle una segunda oportunidad de vida a su hijo.
La historia de Edgar es una de lucha y esperanza. Durante años, enfrentó difíciles tratamientos de diálisis peritoneal que deterioraron su salud, sumiéndolo en un estado de desesperanza. Sin embargo, la luz de la esperanza cobró vida cuando su madre tomó la valiente decisión de donar uno de sus riñones para salvarlo.
El proceso de donación y trasplante se llevó a cabo en dos etapas, primero en el HGZ No. 3 de Aguascalientes y luego en el HGZ No. 33 de Nuevo León. Ambas cirugías se realizaron con éxito el 30 de abril, con el riñón de la madre siendo trasplantado al hijo.
El desafío fue enorme, dada la delicada condición cardiovascular de Edgar. Sin embargo, el equipo médico, liderado por la doctora Norma Cecilia Ruíz Cruz y respaldado por especialistas en Anestesiología, Cirugía de Trasplantes y Urología, trabajó incansablemente para superar cualquier obstáculo.
La emotiva historia de amor y sacrificio de doña Margarita conmovió a todos los presentes. Sus palabras, cargadas de emoción y determinación, reflejan el inmenso amor y la dedicación de una madre por el bienestar de su hijo.
Ahora, tanto la madre como el hijo se encuentran en proceso de recuperación en el Hospital No. 33 del IMSS, con renovada calidad de vida y esperanza para el futuro. Esta historia nos recuerda el poder del amor y la importancia de la familia en los momentos más difíciles.
Redacción / El Telégrafo