James Cameron regresa a Pandora con Avatar 3: Fuego y Cenizas, una entrega que marca un giro dentro de la saga al mostrar que no todo en este mundo es armonía y equilibrio. La historia introduce nuevas tribus Na’vi y un tono más oscuro, donde los conflictos ya no solo vienen de los humanos, sino del interior del propio planeta.
La película tiene una duración de 3 horas y 17 minutos y cuenta con las actuaciones de Sam Worthington, Zoe Saldaña, Sigourney Weaver, Stephen Lang, Jack Champion y Oona Chaplin. Tendrá su preestreno el 17 de diciembre y su estreno el 18 de diciembre.
El conflicto se activa cuando Spider (Jack Champion), hijo humano de Miles Quaritch (Stephen Lang), debe regresar con los suyos tras fallas en la máscara que le permite sobrevivir en Pandora. Durante el trayecto, la familia Sully se cruza con los Mangkwan, una tribu violenta ligada al fuego y liderada por Varang (Oona Chaplin), cuyo avance desata una nueva amenaza para el planeta.
A partir de ahí, la historia presenta al Pueblo de las Cenizas, una tribu Na’vi que rompe con la visión espiritual que había definido a Pandora y expone profundas divisiones internas. Este contexto sirve como telón de fondo para el crecimiento de los hijos de Jake Sully y Neytiri, quienes comienzan a tomar decisiones que marcarán el futuro de su mundo.
Visualmente, Avatar 3: Fuego y Cenizas mantiene el nivel espectacular de la franquicia y está pensada para disfrutarse en pantalla grande. La recomendación es verla en 3D, donde la experiencia resulta mucho más inmersiva y envolvente.
