David Windle, un hombre de 42 años residente en Camberwell, al sur de Londres, vivió una experiencia angustiante cuando lo que parecía ser un simple dolor de espalda se convirtió en un diagnóstico de cáncer. Todo comenzó en diciembre de 2021, cuando Windle comenzó a experimentar dolores persistentes y debilitantes en la espalda, que lo llevaron a buscar tratamiento con osteópatas y fisioterapeutas.
Sin embargo, el dolor continuó empeorando, hasta el punto en que Windle se vio incapacitado para moverse y necesitaba la ayuda de su madre para cuidar a sus hijos. A pesar de los tratamientos iniciales y las visitas al hospital, los médicos inicialmente diagnosticaron a Windle con una hernia discal, pero su condición seguía deteriorándose.
Finalmente, una resonancia magnética reveló que sus vértebras se estaban desintegrando inexplicablemente, lo que llevó a la sospecha de cáncer. Después de una serie de pruebas y exploraciones, Windle fue diagnosticado con mieloma de “cadenas ligeras”, un tipo de cáncer de células plasmáticas.
Su tratamiento incluyó cuatro meses de quimioterapia y un trasplante de células madre en noviembre de 2022. A pesar del duro proceso, Windle se aferró a la esperanza y ahora se encuentra en un régimen de medicamentos que ayudan a prevenir problemas óseos relacionados con el mieloma.
Esta experiencia ha sido devastadora para Windle y su familia, pero su historia destaca la importancia de la atención médica temprana y la persistencia en la búsqueda de respuestas cuando se enfrenta a un dolor inexplicable.
Redacción / El Telégrafo