En respuesta a la crisis de escasez de agua en el pasado, el Gobierno de Nuevo León ha iniciado la instalación de 50 kioscos de agua gratuita en áreas vulnerables del área metropolitana de Monterrey. Este proyecto tiene como objetivo asegurar el acceso al líquido vital para los residentes de la región.
El primer kiosco fue inaugurado en la colonia Fomerrey 35, en los límites de Monterrey y Escobedo, por el gobernador Samuel García. Este espacio, abastecido por un pozo de agua con capacidad para surtir 5 mil garrafones diarios, será accesible para los residentes que cuenten con una tarjeta especial llamada “Aydé”.
El gobernador explicó que la tarjeta “Aydé”, proporcionada por Servicios de Agua y Drenaje de Monterrey (AyD), permitirá a los vecinos obtener un garrafón de 20 litros de agua potable diariamente. Aunque el caudal de este pozo es insuficiente para conectarse a la red de AyD, se espera que satisfaga las necesidades de la población de este sector.
La Secretaría de Igualdad e Inclusión será la encargada de distribuir las tarjetas magnéticas en los distintos municipios, garantizando el acceso al agua potable para alrededor de 30 mil hogares que carecen del servicio en Nuevo León.
Además de los kioscos de agua, se está trabajando en la reparación de fugas y se ha duplicado la cantidad de pozos en comparación con el inicio del mandato gubernamental, pasando de 180 a 400 pozos habilitados para el suministro de agua.
Como parte de una alianza con Caintra, Arca Continental y Heineken, se han instalado 22 sistemas de captación de agua pluvial en los Centros Comunitarios de la dependencia estatal, ampliando las opciones de acceso al vital recurso hídrico para uso doméstico. Este esfuerzo conjunto refleja el compromiso del Gobierno de Nuevo León para garantizar el derecho humano al agua para todos los neoloneses.
Redacción / El Telégrafo
